
Hacía un par de años que Teresa Miján, una de las hijas del que fuera escribiente de La Resinera, tenía en su cabeza la idea de reunir a todas aquellas personas que por unas razones u otras estuvieron vinculadas a La Resinera. Tras múltiples gestiones telefónicas y redes sociales, el pasado viernes consiguió materializarlo. Fue una jornada de agradable climatología, lo que permitió desarrollar el programa previsto consistente en un recorrido por los alrededores con visita al paraje de la Islilla, subida al Mirador y recorrido por las antiguas instalaciones de este complejo fabril.