Liga de verano

 Un mal arranque de los cocinas y la puntería de Malagón pusieron el marcador en un 0-2 que desilusionaba a la escuadra de Santa Cruz. Quince minutos de dominio del 2000 que incluso pudo aumentar la renta, y que dominaba gracias a una buena circulación de balón. En el último tramo de parte un carrusel de ocasiones desperdiciadas por Montalban, Eto,o necesitó tres ocasiones para afinar la puntería – Pablo le sacaba una mano abajo impresionante – y ninguno parecía tener clarividencia. Pero tanto fue el cántaro a la fuente que al final Sergio acortaba distancias y así se llegaría al descanso. Hasta entonces un partido tranquilo. En la segunda Amine después de mucho intentarlo hacía el ansiado y celebrado empate aunque muy poco duró la alegría a la parroquia pansi que vería como Márquez recogía un rechace de un disparo potente de Pablito para adelantar de nuevo a la roja. Llegarían los momentos más tensos del partido, amarillas a doquier y reproches e incluso varias tanganas que afearon el encuentro entre el segundo y tercer clasificado. Chanchi dilataba las distancias con una carrera desde propio campo – Miranda recibía un golpe en el córner y la Fábrica no la tiraba fuera cuando alguno lo reclamaba, Chanchi no se dio cuenta y llegaba hasta el final – para definir cruzado. La jugada más polémica vino de un saque de puerta lanzado directamente, el cuero no lo tocaba nadie ante la salida en falso de Pablo y terminaría dentro del marco, el árbitro lo anulaba y el resultado no cambiaba. En el descuento Sergio Ramos de nuevo encontraba puerta para darle emoción pero nada más sucedió, la Fabrica se queda en segunda posición y Cocinas en tercera a esperas de lo que haga Maracanazo.

 Alternó paradas extraordinarias – una volada a tiro a la escuadra de Sergio, otra a la base del poste para sacar un disparo de Amine Eto,o entre otras – con salidas en falso o quedarse metido en la cueva cuando debía agrandarse en el área.

 

 Debió subir al marcador un gol botado en saque directo de puerta, considerado este lanzamiento como directo no hace falta que nadie toque el balón y por lo tanto tuvo que subir al marcador.