El Centro Artístico de Granada acoge un debate sobre el ciclismo granadino de los años 50



En el coloquio participaron Jiménez Quiles, Enrique Moleón, Ángel Camarero y Antonio de Miguel.

 El Centro Artístico, Literario y Científico de Granada ha acogido un debate sobre la historia del ciclismo granadino de los años 50 para resaltar la dimensión cultural de este deporte y el papel de los corredores y la afición en aquellos años de la postguerra, recogidos en el libro 'Jiménez Quiles.

 Memoria de un ciclista' de la periodista Ángela J. Maldonado. El encuentro deportivo-literario, moderado por el periodista alhameño Antonio Arenas y con la presencia del escritor y académico de las Buenas Letras de Granada, Francisco Gil Cravioto, congregó a medio centenar de ciclistas veteranos y aficionados entre ellos Antonio Jiménez Quiles y Joaquín Galera, dos leyendas deportivas que, aún hoy, siguen representando los mejores palmarés del ciclismo de la provincia.

 Gil Craviotto aseguró que el libro sobre Jiménez Quiles viene a llenar un vacío y da fe de un pasado histórico del ciclismo granadino que no conviene olvidar y le da a este deporte un esplendor y un brillo que no todo el mundo sabe reconocerle, algo que, según el escritor, sí hace la literatura francesa, que contiene muchos textos en honor del invento de Ernest Michaud: la bicicleta. El libro de Ángela cumple a maravilla la petición que el poeta Franc-Nohaín hizo a finales del siglo XIX: narrar los hechos y las gestas de los ciclistas y sus bicicletas. «Es la primera vez que alguien responde en Granada a tan poética y deportiva petición», dijo.

 Una bicicleta Gaitán, una reliquia del mundo del pedal de los años 40, presidió el coloquio en el que participaron también Enrique Moleón, autor de la 'Historia del Ciclismo Granadino'; el delegado de la Federación Andaluza de Ciclismo, Ángel Camarero y el presidente de la Unión Velocipédica Granadina, Antonio de Miguel. A preguntas del público también lo hizo, Joaquín Galera. Es la primera vez que el Centro Artístico granadino aborda el ciclismo desde una perspectiva cultural, algo que los aficionados valoraron como muy positivo.