¿Es la envidia, cimiento de la democracia?
Heráclito, filósofo presocrático, de Éfeso, escribió: "tendrían que haber ahorcado a todos los ciudadanos de Éfeso por decir: "No puede haber, entre nosotros, ninguno que sea el primero".
Esa pasión, debió inspirar el sentimiento democrático, en la mayoría de aquellas "Ciudades-Estado", de la antigua Grecia.
Bertrand Russell, en La Conquista de la Felicidad, mantiene que lo mismo puede decirse de la democracia moderna.
Qué, aunque teóricamente, la democracia es la mejor forma de gobietno, ante los grandes cambios, esa teoría se esconde tras el disfraz de la pasión.
"Y la pasión que ha reforzado las teorías democráticas es, indiscutiblemente, ¡la pasión de la envidia!".
¡Cuánta sensatez!
Felicidades a:
Sofía, Clemente, Félix, Inés, Fortunato, Hilarión y Proclo.
(Sojia es la forma griega de Sofía=sabidiría que, se ha mantenido, en el tiempo.
La Basílica de Santa Sofía, fundada por Constantino el Grande, en Costantinopla, es a la Iglesia Oriental lo que la Basílica de San Pedro en el Vaticano es a la Iglesia Católica.)
Hasta mañana, paz y bien.