Sandra García también se la puede jugar en estas elecciones


 Sandra García ostenta el más alto cargo de la Junta en la provincia, si su partido no obtuviese buenos resultados en su pueblo de Alhama se le podría poner complicado que cuando se forme el nuevo Gobierno de la Junta siguiera en su cargo, ante otros aspirante a este puesto con mejores resultados locales.

 A Jorge Guerrero, candidato a la alcaldía alhameña, le acompaña un buen equipo. Personas preparadas, llenas de ilusión y decididos a la entrega. Jóvenes con entusiasmo, preparación y experiencia y, sobre todo, plenamente decididos por dar y conseguir para todos los habitantes de Alhama un pueblo mejor, mucho mejor.

 Ahora bien, una opción política a un Ayuntamiento, no se puede quedar tan sólo en eso. En necesario que tenga respaldo, apoyo, equipo a compartir la tarea allí donde sea necesario. En este caso, desde la propia organización política que lo sustente. Y aquí, por fortuna, tenemos a Sandra García Martín, representante destacada del PSOE a nivel local y comarcal, máxima representación político-administrativa a nivel provincial de la Administración Autonómica.

 Un referente es Sandra García Martín que, dedicada años a la política municipal alhameña, ha ido obteniendo la confianza de su organización política para ocupar otras responsabilidades públicas hasta llegar a ser la delegada del Gobierno de la Junta de Andalucía en Granada.

 Desde agente de empleo y desarrollo local en Jayena, pasando por la Mancomunidad de Municipios y tras la entrega municipal a Alhama, ha sido delegada provincial de Turismo, Comercio y Deporte, directora general de Calidad, Innovación y Prospección Turística, delegada territorial de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente, y ahora es delegada del Gobierno de la Junta de Andalucía. Cumpliendo con creces allí donde ha estado. A todos ha servido y atendido y, nuestra Alhama es testigo de excepción de ello, poniendo entrega y atención, jamás discriminación o partidismo.

 Sandra es un ejemplo de alhameña, de esas personas que ha dado esta tierra y que parece que están hechas de una pasta especial que les hace entregarse a causas nobles, a ser generosos, a ser desprendidos, en una palabra, a ser buena gente. La bondad es la expresión suprema de la inteligencia. Nuestra paisana ha puesto al servicio del bien común esa inteligencia de saber que, solo haciendo el bien, a todos, sin distinción alguna por forma de pensar, por ideología, por cualquier otra circunstancia personal o social, se puede tratar con dignidad a los demás. Y a uno mismo.

 La política no pasa ahora por sus mejores momentos en ninguno de los lugares de este país. Una vez más, como en tantas ocasiones de nuestra historia, el descontento social derrama sobre todos los servidores públicos (es más correcto que llamarles políticos a secas) la sospecha, el rechazo y el desprestigio. Este pueblo siempre ha tenido la fratricida tendencia de generalizar. Como se ha afirmado si la mayoría de las personas no hubieran sido buenos la Humanidad ya se habría extinguido, nosotros tendríamos que decir que si la clase política hubiera sido toda tan mala como injustamente estamos calificándola, este país se hubiera ido al traste desde hace tiempo. En Alhama, por fortuna, nos conocemos todos y sabemos de qué pie y mano cojea y coge cada uno, cuando una u otra cosa se da o está dando hasta descaradamente. Ahora bien, la gran mayoría de los políticos, como de los no políticos, son gente honrada y trabajadora.

 Sandra ha sido y sigue siendo una de esas personas, de las que han hecho las cosas bien, de las que se ha mantenido en su sitio honradamente y honestamente. Por eso quizá sea el tiempo ahora de valorar a este tipo de personas en los partidos políticos y como nos interesa, por el bien de pueblo y habitantes, estar con ella, mostrarle nuestro reconocimiento y apoyo, hacer ver hasta a su misma organización política que nosotros también estamos con ella para que siga siendo una gran servidora pública, como lo es y será allí donde esté.

 Sandra es una de esas personas que no han caído nunca en aquello de que cuando se es poderoso se deja de ser todo lo demás "si quieres saber quién es fulanillo, darle un carguillo". Sandra ha estado en lo poco y en lo mucho siempre con la gente, sin perder nunca de vista donde está y de donde viene, que seguro es la mejor forma de hacer las cosas, pero sobre todo de ser persona que es lo primero que hay que ser cuando se dedica uno a la política, o sea a servir a los demás.

 La ceguera de muchos partidos políticos de no darse cuenta de que tienen en su seno a personas como Sandra, es justamente una de las razones por las que tienen los problemas que tienen. Hay que mirar dentro, porque dentro muchas veces está la solución. Escuchamos el tópico manido de que “hay que abrir el partido a la sociedad”. Y es cierto, pero sin dejar de mirar a las personas que tenemos al lado, que tienen una gran trayectoria y pueden tener un excelente futuro. Para eso basta con quitarse las anteojeras, con mirar bien y observar mejor, esa extraña virtud tan en desuso, sin olvidar que el mejor aval es lo hecho y realizado, no lo que se promete y simplemente se dice sin fundamento, improvisando una y mil veces.

 Por todo ello radica la importancia de hacer ese ejercicio de valoración, para hacer valer este tipo de personas. Para eso Sandra García también debe de obtener el respaldo de sus paisanos en las elecciones de este domingo, para que precisamente su partido siga demostrando que cuenta con gente válida. Haciéndole ver que Alhama quiere seguir la senda de respaldar a la actual Delegada del Gobierno, para que Alhama pueda mirar al futuro con más optimismo, teniendo apoyos en las instituciones para poder defender los proyectos alhameños de interés general.

 Hay gente buena en los partidos, muy buenas, cercanas al pueblo, trabajadoras incesantes, honradas, con proyección para lo que ahora se llama la “nueva política”, con una enorme capacidad personal de convocar consensos, con madera de liderazgo. Jorge, sin lugar a dudas es un ejemplo, ya lo ha demostrado en sus años de concejal y, sobre todo, en cómo ha desarrollado la campaña electoral como candidato. Con seriedad, responsabilidad y sabiendo muy bien lo que a Alhama y a los alhameños necesitan, corresponde e interesa. No ha perdido el tiempo en ladrarle al adversario político. Con su equipo municipal y con el apoyo de su organización política, comenzando por personas como con la que cuenta Alhama en el caso de Sandra, precisamente desde la esfera de la Administración que tanto apoyo puede prestar a todos y cada uno de los pueblos andaluces, tenemos asegurado una mejor Alhama para todos. Eso sí, con la decidida participación de los alhameños el domingo con su voto y durante todo el año con su participación y entrega en la hermosa tarea de conseguir un pueblo cada vez mejor para todos, sin la más mínima exclusión.