Viaje de alhameños y zafarrayeros a Bagnères



Fue para un fin de semana compartido con los senderistas de este pueblo francés hermanado con Alhama de Granada, Bagnères de Bigorre, aprovechando los días de las recientes vacaciones.

 


  Llegamos sobre las dos de la tarde al ayuntamiento de Bagnères de Bigorre, donde nos tenían preparado un pequeño refrigerio, los discursos de bienvenida haciendo referencia a nuestros Ayuntamientos hermanados, así como a nuestros respectivos alcaldes.

  Descansamos en casa de nuestros anfitriones, y sobre las seis de la tarde teníamos preparado un relajante circuito en el Spa Aquensis,  dos horas de baños, saunas etc., que nos ayudó a desentumecernos del largo viaje.

  El día siguiente fue muy intenso, mientras los senderistas hacían la ruta hacia el refugio, nosotros les preparábamos el almuerzo. Les esperaban una comida y bebida reparadora a la caminata pirenaica, así como  un reconfortante fuego para que se calentasen tras un recorrido rodeado de colinas blanqueadas por la nieve, y donde la niebla también hizo acto de presencia.  Una comida que terminaría entre canciones andaluzas y bagnèresas,  emocionante.

  La noche fue más emocionante si cabe, la cena de convivencia en un pequeño restaurante muy típico, donde nos reunimos bagnèreses, zafarrayeros y alhameños. Cenamos y cantamos durante más de tres horas.

  El sábado nos reunimos en el mercado, todos compramos queso y productos típicos. Ya por la tarde muchos se acercaron a Lourdes, que como sabéis está muy cerquita de nuestro pueblo hermano. Sobre las seis de la tarde nos tenían preparado un bufé en la sede de los cantantes montañeses, no querían que tuviéramos que parar para cenar, pues la hora de salida fue a las nueve y media de la noche.

  La despedida emocionante como siempre, pues la lagrimas afloraron a nuestros ojos y donde ellos nos pedían que trajéramos besos y abrazos a los alhameños que no pudieron viajar.

  Uno de los viajes más interesantes y emocionantes vivido por los hermanos de ambos pueblos. Gracias Bagnères, intentaremos corresponder a tanto cariño como hemos recibido.