La calle Camino de Hachuelo, más conocida por los alhameños como el "Lejío", se inicia en la Plaza Duque de Mandas y asciende hasta atravesar la carretera que nos comunica con Zafarraya para desembocar en la famosa "Cruz de Hachuelo" de la que hay una pequeña historia que he rescatado de "LOS RECUERDOS MARIANOS O ALHAMA Y SU MADRE" de Federico Antonio Sánchez de Gálvez y del que hizo un estudio preliminar nuestro paisano e historiador Salvador Raya Retamero y que dice asi:
Alhama la suspirada
La calle Camino de Hachuelo, más conocida por los alhameños como el "Lejío", se inicia en la Plaza Duque de Mandas y asciende hasta atravesar la carretera que nos comunica con Zafarraya para desembocar en la famosa "Cruz de Hachuelo" de la que hay una pequeña historia que he rescatado de "LOS RECUERDOS MARIANOS O ALHAMA Y SU MADRE" de Federico Antonio Sánchez de Gálvez y del que hizo un estudio preliminar nuestro paisano e historiador Salvador Raya Retamero y que dice asi:
Fue construida en 1.958 por el escultor granadino Nicolás Prados López por encargo del alcalde de aquella época, Jerónimo Castillo Prados.
Esta fuente, también llamada "Fuente Las Peñas", se encuentra bajando desde el mirador de los tajos que hay junto al antiguo cine y a espaldas de la iglesia del Carmen, hacia la cuesta llamada Rivera de los Molinos, que entre otros lugares de interés nos conducirá por un sendero precioso a conocer la ruta de los antiguos molinos harineros de Alhama.
Se encuentra en la Plaza del Matadero hacia la cuesta que nos lleva al Puente Siete Ojos, que es el lugar donde actualmente se coloca el mercadillo de los viernes.
Es uno de los pilares más emblemáticos de la ciudad, adosado al pie de la torre de la Iglesia de Nuestra Señora de la Encarnación. Fue mandado construir por el Concejo de Alhama en el año 1.566. Su actual aspecto se debe a las remodelaciones sufridas con posterioridad.